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Los mayores dan un toque de atención a las marcas

La proporción de gente mayor en nuestra sociedad va en aumento. Y como ya hemos comentado en un artículo anterior, incluso en edades muy avanzadas la mayoría están estupendos. Esto significa que hay un creciente segmento de la población explorando y descubriendo nuevas formas de afrontar la vida. Con nuevas necesidades y demandas. Con nuevos sueños y expectativas. Además, dentro del contexto económico actual, se trata de un grupo económicamente más acomodado en comparación con otros, lo que les otorga mayor capacidad de consumo. Viéndolo así, parecería que se trata de un sector social especialmente atractivo para las marcas. Sin embargo, no es ésta la percepción que tienen los mayores. Es la conclusión a la que llega la consultora Nielsen tras un estudio global realizado con más de 30.000 consumidores distribuidos en 60 países.

Según este estudio, sólo el 38% de las personas de edad avanzada se siente identificado con la publicidad actual. El resto no se ve reflejado en ella. Por otro lado, los mayores no se sienten demasiado cómodos con los productos que encuentran en el mercado. Así, el 44% de los encuestados señala las dificultades que tienen para leer las etiquetas por el tamaño de letra que utilizan. Un 25% advierte que los productos alimenticios que encuentran no cumplen con sus necesidades nutricionales, mientras que un 43% dice tener dificultades a la hora de abrir los envases. Asimismo, el estudio destaca las carencias en los servicios orientados a su edad. En la madurez, las personas pierden confianza a la hora de cubrir sus necesidades: el 57% de los encuestados habla de la pérdida de capacidades físicas y un 51% de una menor agilidad mental, algo que, según esta encuesta, las empresas no tienen muy en cuenta.

Quizás el problema se origina por dos motivos: Por un lado, por el atractivo que supone dirigirse a la gente joven pensando que se está trabajando en un mercado de futuro; pero a la vez existe un prejuicio hacia los mayores como personas inactivas, con poca capacidad adquisitiva y que no juegan un papel importante en la sociedad.

En realidad, la gente de la tercera edad es un grupo con un enorme potencial de consumo. Y está deseando que las empresas aprendan a dirigirse a ellos teniendo en cuenta sus necesidades, mostrando una preocupación real por su bienestar. Nuestros mayores están en una nueva etapa llena de posibilidades. Se sentirán más atraídos por las marcas que den una imagen positiva de su edad, que les traten como personas autónomas, que reconozcan y admiren su experiencia de la vida, que les inviten a disfrutar de las cosas que les gustan y aprecian…  Quizás esto último no es algo que diga el citado estudio.

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