ISO IS742 050

Los mayores son el futuro

Aumenta la esperanza de vida en España ¿Dato positivo o negativo?

Durante toda nuestra vida, hemos oído la expresión: “Los jóvenes son el futuro”, y por ello la sociedad debe poner todo su empeño en invertir lo que sea necesario para ofrecerles una buena educación y formación tanto en su potencial personal como profesional.

Esta responsabilidad es debida a que los jóvenes son “teóricamente” los que en un futuro cercano sacarán a delante el país y la sociedad en general; serán ellos los que “gobernarán” tanto en capacidad como en mayoría, pero… ¿Hasta que punto es real actualmente esta tradicional idea?

Al parecer, según un gran numero de expertos, es muy probable que el 75% de los españoles que hoy tienen entre 40 y 50 años lleguen a alcanzar los 90 y por ello exista un mayor numero de mayores o ancianos que jóvenes. Por primera vez en la historia, cuatro generaciones de españoles coexisten y coexistirán en el mismo momento, aunque en pocos casos cohabiten, nunca ha habido en España tanta “cantidad de vida”, concepto que se refiere a la coincidencia en el tiempo y en el espacio de varias generaciones ¡Datos y predicciones realmente sorprendentes!

En principio, estos datos deberían ser buenos y esperanzadores respecto a nuestro futuro y el de las personas que amamos, tendremos la suerte de aumentar nuestra esperanza de vida y por lo tanto disfrutar de esta unos años más. Pero esta idea, vista desde otro punto de vista, puede llegar a ser aterradora, ya que también debemos tener presente en todo momento que el aumento de la esperanza de vida puede conllevar consecuencias negativas.

¿En qué condiciones llegaremos a estas elevadas edades? ¿Quién nos cuidará? ¿Qué grado de autonomía conservaremos? ¿Con qué pensiones contaremos, con qué servicios públicos? ¿Y cómo se financiarán?

Llegado a este análisis, personalmente me pregunto: ¿Cómo se irá creando y consolidando en los próximos años ese futuro envejecimiento generalizado de la población?, sobretodo teniendo en cuenta lo sobrevalorada que esta la juventud. En un gran número de civilizaciones los ancianos han sido valorados y respetados por su sabiduría, experiencia y seriedad, pero en nuestra sociedad actual, las personas mayores  tienden a  tener poca relevancia respecto a la juventud, y normalmente aspiran a ser cuidados por su fragilidad. La poca representación de la tercera edad puede observarse en el hecho, por ejemplo, de la poca presencia de personas mayores en televisión, cine, revistas o  publicidad; al contrario que los jóvenes o adolescentes, los cuales están sobredimensionados. Los jóvenes se nos muestran no únicamente como modelos estéticos, sino como modelos vitales a imitar.

Frente a ese ideal tan interiorizado, ¿se irá creando una «cultura madura», unos modelos públicos positivos de la tercera (y la cuarta) edad, y una buena forma de afrontar esa etapa de la vida?

Este hecho ha implicado i implicará de ahora en adelante, millones de euros invertidos en la provisión de servicios sociales y sanitarios, la promoción de la autonomía de las personas dependientes, la atención a domicilio y la preparación de las casas para ser habitadas por personas de edad o dependencia avanzadas. Porque es evidente que, a ser posible, la gente desea envejecer en su hogar, rodeada de sus personas, animales y objetos queridos, reforzada por el círculo de hábitos, y sentidos que han formado su existencia…. Millones bien invertidos, pues: ¡los mayores son el futuro!

Deja una respuesta